Consejos de aseo para cuidadores
Si eres padre o cuidador de una persona con discapacidad que actualmente vive sola o cuyo objetivo es vivir de forma independiente, puede que estés acostumbrado a ayudarle con su rutina de higiene personal. Puede que te resulte difícil saber cómo transferirles esas tareas o cómo ayudarles de la mejor manera posible respetando su independencia. De eso trata esta página.
Es importante recordar que la independencia debe seguir siendo la máxima prioridad. La mejor manera de ayudar es prestar asistencia sólo cuando se necesite y se pida. Estas son algunas cosas que hay que tener en cuenta:
Fomentar la independencia
Esto ayuda a reforzar la autoestima, la sensación de control y la confianza de la persona. Puedes apoyar su autonomía dándole instrucciones claras, reconociendo cualquier incertidumbre o ansiedad que pueda tener al realizar determinadas tareas y ayudándole a desarrollar rutinas.
Proteger la dignidad y la intimidad
Por ejemplo, sitúate fuera de las cortinas de las duchas y detrás de las puertas, dispuesto a ayudar pero respetando los límites.
Seguir evaluando la independencia
La independencia no se consigue de la noche a la mañana: es un proceso. Estate preparado y disponible para ayudarles, pero dales siempre la oportunidad de hacer las cosas por sí mismos, asegurándoles que estás disponible para ayudarles si lo necesitan.
Hacer preguntas y determinar sus preferencias
Independencia significa que pueden elegir sus productos, su peinado, su ropa y otros aspectos de su aspecto personal. Si necesitas ayuda, apoya sus decisiones en lugar de tomarlas por ellos. Esto también significa ser sensible a sus necesidades y prácticas personales o culturales.
Comunicar con eficacia
Esto puede significar utilizar un lenguaje sencillo o ayudas visuales, demostrar acciones, etc.
La seguridad, ante todo
Su ayuda es más necesaria cuando se trata de garantizar la seguridad y la sensación de protección de la persona. Esto podría significar asegurarse de que el equipo está en buen estado de funcionamiento y colocado correctamente, mover alfombras sueltas u otros obstáculos, y tener cuidado de no herir accidentalmente a la persona por precipitarse.
Promover la sensibilización sobre la discapacidad
Los salones de belleza y spas son grandes recursos para las personas con discapacidad, ya que les permiten satisfacer sus necesidades de higiene personal con más facilidad que intentar realizar tareas que pueden suponer un reto. Sin embargo, a menudo estos negocios no están diseñados para ser inclusivos. Si encuentras un salón de belleza que sea inclusivo, comparte lo importante que es para ellos y para tu red personal. Y si ves uno que no lo es, asegúrate de hacer oír tu voz mientras abogas por ello. Cuando busques un salón de belleza, pregunta específicamente qué adaptaciones hacen para las personas con discapacidad.